Aunque ambos se utilizan para lubricación, las grasas de litio y los lubricantes de silicona tienen diferentes especialidades y usos. Es muy importante conocer estas diferencias para poder elegir el producto correcto para el trabajo que necesita realizar para proteger y maximizar la productividad de tus cortinas enrollables de acero.
Al comparar la grasa de litio blanca con el lubricante de silicona, es importante tener en cuenta las diferencias en las fórmulas y cómo afectan sus usos.
Quizás se pregunte qué diablos es la grasa de litio. En realidad, es una de las fórmulas lubricantes más populares en todo el mundo y esto se debe a sus propiedades multifunción. Es resistente al agua y al calor, lo que significa que protege el metal de la corrosión y la oxidación y puede funcionar en temperaturas extremas de hasta 150 °C. La grasa de litio blanca demuestra una excelente adhesión al metal y es perfecta para lubricar metal sobre superficies metálicas.
Por otro lado, el lubricante de silicona se puede utilizar en una variedad de superficies. Tiene un rendimiento excelente sobre caucho, pero también es muy eficaz en superficies de plástico, metal, madera y otros materiales. También ayuda a prevenir la oxidación y la corrosión de las superficies porque su fórmula impermeabilizante repele la humedad de las superficies. No hace falta decir que es un lubricante sumamente eficaz y evita la fricción y la pegajosidad en las zonas donde lo aplicas. También repele la suciedad, el polvo y la mugre y garantiza que las superficies estén protegidas y mantenidas a largo plazo.